UNOS CULINOS ... Casa Pardo

Avda de Pablo Iglesias, 69 Gijón

Javier, el más joven de los hermanos Méndez de La Zamorana navega solo en esta popular sidrería a la que poco a poco va imprimiendo su particular concepción. Del antiguo rumbo de la casa, conserva la proverbial generosidad de los pinchos (a poco que uno se descuide con dos de sidra le mandan a casa cenado) pero desde su llegada se hace patente un mayor cuidado en el servicio y el local va mejorando paso a paso. La transformación más notoria, a la que seguramente sucederán otras, se manifiesta en la fachada totalmente renovada, con una espectacular cetárea de mariscos y un escaparate refrigerado en el que se muestran ostentosas piezas de pescados frescos.

Con la sidra y una notable carta de vinos, se ofrece una cocina sin complicaciones basada en la calidad del producto, fundamentalmente pescados y mariscos. Desde un humilde y sabroso guiso de "llámpares" una bandeja de oricios en su época o una ración de parroches o bocartes, hasta unas buenas cigalas, langostas o bogavantes, pasando por las calderetas y parrilladas de pescado, marisco o mixtas hay un amplio abanico de posibilidades de disfrutar la cocina marinera a base de piezas bien seleccionadas, cocinadas con corrección impecable y servidas en raciones generosas. Paté de cabracho, Salpicón especial de marisco y rape, chopitos de Huelva o fritura de pescaditos sirven, además de un largo surtido de mariscos, para compartir una entrada o simplemente acompañar unos culetes. Para entonar el cuerpo la sabrosa sopa de marisco o la crema de nécoras y para entradas de más enjundia las Fabes con almejas, la fabada asturiana o los arroces (con marisco, con bugre o caldoso con almejas) para un mínimo de dos abundantes raciones.

Los pescados a la espalda o a la plancha, al horno, o en guisos de cazuela como el Rape con almejas, los lomos de merluza, mariscada o con verdura, la chopa a la sidra, o guisos marineros como el Tiñosu con patates son, junto con los mariscos lo más recomendable de esta casa, aunque quien se empeñe dispone también de carne roxa asturiana.